La cebolla es una verdura con un sabor particular, que gusta a muchos y disgusta a otros tantos. Pero más allá de ser un alimento, estas se ha popularizado por sus múltiples aplicaciones medicinales y por sus propiedades para la belleza y la salud.
En este caso vamos a compartir los beneficios de la cebolla para tratar las cicatrices, ya que es un ingrediente que puede atenuarlas y mejorar la salud de la piel.
Cebolla para tratar las cicatrices
La cebolla ayuda a regenerar la piel dañada y gracias a ello ayuda a recuperar la piel cuando ésta sufre de cicatrices. Para obtener este beneficio es importante preparar un extracto de cebolla, el cual se aplica en las zonas afectadas para mejorar la salud de la piel. El extracto de cebolla contribuye a la producción de colágeno en la zona afectada, reduciendo notablemente las cicatrices.
El extracto de cebolla es altamente efectivo en casos de cicatrices hipertróficas y queloides, que suelen ser las que más se notan por su textura en la piel. El resultado de este tratamiento se empieza a notar después de 6 u 8 semanas de aplicación.
¿Cómo preparar el extracto de cebolla para tratar las cicatrices?
El extracto de cebolla es simple de hacer y económico: para prepararlo necesitarás tabla para cortar y cuchillo, jabón para platos, agua, hielo, termómetro, filtros de café, agua destilada, sal y dos recipientes medianos.
Instrucciones:
Mezclar 3 gramos de sal con 10 gramos de jabón. Cortar la cebolla en pequeños trozos uniformes y colocar en uno de los recipientes, vertirle la mezcla de la sal y el jabón y revolver. Colocar a baño María por 15 minutos, transferir a un baño de agua helada durante cinco minutos y revolver constantemente. Licuar por 5 segundos. Utilizar el filtro de café para colar la mezcla sobre el segundo recipiente. La espuma de la mezcla quedará dentro del filtro mientras que el extracto de cebolla caerá en el recipiente.
Cuando ya tengas listo el extracto de cebolla lo puedes aplicar en las zonas afectadas una o dos veces al dia , ya sea aplicándolo directamente o mezclándolo con algún tipo de crema hidratante.
Antes de utilizar este producto con frecuencia es recomendado utilizar sólo pequeñas cantidades en el área de la piel afectada, para verificar que no presenta ningún tipo de alergia o reacción desfavorable. Por esta razón, se deben tener muy en cuenta las reacciones en la piel y suspender el tratamiento en caso de enrojecimiento y/o irritación.
Recuerda que para obtener mejores resultados es muy importante mantener hidratada la zona afectada por las cicatrices. En este caso puedes optar por aplicarte una buena crema hidratante comercial, o bien, utilizar un aceite hidratante como el aceite de coco o de oliva.